Eucaristía
La eucaristía el Señor nos alimenta con su propio cuerpo y sangre, para que tengamos fuerzas en el nada fácil camino de la vida.
"Nuestro Salvador, en la última Cena, la noche en que fue entregado, instituyó el Sacrificio Eucarístico de su cuerpo y su sangre para perpetuar por los siglos, hasta su vuelta, el sacrificio de la cruz y confiar así a su Esposa amada, la Iglesia, el memorial de su muerte y resurrección, sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de amor, banquete pascual en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la gloria futura" (SC 47).
La Eucaristía es "fuente y culmen de toda la vida cristiana" (LG 11). "Los demás sacramentos, como también todos los ministerios eclesiales y las obras de apostolado, están unidos a la Eucaristía y a ella se ordenan. La sagrada Eucaristía, en efecto, contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, es decir, Cristo mismo, nuestra Pascua" (PO 5).
Por la celebración eucarística nos unimos ya a la liturgia del cielo y anticipamos la vida eterna cuando Dios será todo en todos (1 Co 15,28).
Las primeras comuniones se celebran el segundo y tercer domingo de mayo, después de tres cursos de catequesis de preparación.
Los domingos a las 12:00h, nos reunimos todos los grupos para participar y celebrar la eucaristía de la comunidad.
La liturgia en los domingos ordinarios la preparan entre todos los grupos, cada uno lo que le corresponde según un enunciado que se reparte al comienzo del curso. Animando con el canto los diferentes coros de la parroquia.
En las celebraciones especiales la prepara el equipo de liturgia.
Todos los acontecimientos pastorales se celebran en esta eucaristía.